Tus miradas talismán,
un caudal de sensaciones
desbordando susurros,
que recito en tus caderas
y en fuego se deshojan.
El placer de las entrañas
emerge entre tus curvas,
y los versares más íntimos
de las emociones literarias,
palpitan en mi cuerpo.
En tus dos soles me cobijo,
y nacen tus plegarias
que despiertan los anhelos,
embriagando mis suspiros
que derrito en tus labios.
Descubro los secretos
de tan delicioso momento,
al penetrar tu gruta dorada,
abrazando los sueños
fantasía de mis tentaciones.
El cuerpo coquetea agitado
bajo olas de tu mar bravío,
que disuelve los suspiros
derramando los aromas,
deliciosa exquisitez de la piel.
Copyright © Ricardo Miñana
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5 comentarios:
El amor nos deja sensaciones únicas que guardamos en nuestro interior como un preciado tesoro.
Besos
!Hola,Ricardo!
Una exquisita y dulce manera de amar a una mujer.Muchos besitos y buena semana.
Belíssimo poema!
Saludos.
Versos que nacen de los sentimientos, de las emociones.
Saludos.
Excelente poema!
Saludos.
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